Pese a que hace unos días un sacerdote fue asesinado al interior de una iglesia en el municipio de Cuautitlán Izcalli, no se reforzará la seguridad para el clero mexiquense, dijo el titular secretario General de Gobierno, Alejandro Ozuna Rivero.
El funcionario público informó que aunque se han reunido las autoridades eclesiásticas, no se ha planteado aplicar seguridad especial para proteger a sacerdotes y obispos mexiquenses, precisó Ozuna Rivero.
“Nos hemos reunido no solamente con los párrocos, también con los obispos y los cardenales pero hasta este momento no han solicitado seguridad”, mencionó el secretario.
El pasado 18 de abril en el municipio de Cuautitlán Izcalli, un sacerdote fue asesinado al interior de la iglesia “Nuestra Señora del Carmen” ubicada en el fraccionamiento Cumbria.
El sacerdote habría discutido con un hombre que ingresó al recinto religioso y quien lo apuñaló con una arma punzocortante para después darse a la fuga.
Ozuna Rivero precisó que en ninguna de las zonas del estado, se ha solicitado ayuda al gobierno para reforzar seguridad en torno a las iglesia y los sacerdotes, incluida el sur mexiquense, donde se generan la mayoría de las intimidaciones.
De acuerdo con datos del Centro Católico Multimedial, desde el año 2013 se han cuantificado 22 sacerdotes asesinados en el país.
Esto sin contar con las agresiones, como las extorsiones e intimidaciones que se generan en diversas regiones, incluido el Estado de México.
