Cada vez es más común la venta de juguetes bélicos en jugueterías, mismos que incitan la violencia en los niños y niñas que juegan con ellos.
Estos artefactos son vendidos a precios que van desde los 50 a los 150 pesos, según su tamaño y funciones, en los tianguis y mercados tradicionales, así como en puestos ambulantes y ferias de fiestas patronales.
Tras un recorrido de esta casa editorial a estos centros de venta, se pudo constatar que en los empaques se puede leer datos como calibres de balas, sonidos de ataque y medidas de un arma de verdad, además de que los juguetes pueden llegar a ser réplicas de armas de alto calibre, como las ametralladoras, UZI, R15, 45 milímetros, revolver, entre otros.
Entre la venta de estos juguetes también se encuentra indumentaria militar, tales como las esposas, utilizadas en el aseguramiento de presuntos delincuentes.
Su parecido con las armas reales, ha provocado que incluso algunos presuntos delincuentes compren este tipo de artículos para cometer ilícitos.
En esta temporada de vacaciones los padres de familia también deben considerar el llevar a sus hijos a algún centro de acopio de juguetes bélicos y, que a cambio reciban juguetes didácticos tradicionales, los cuales contribuyen en la sana convivencia.
Al momento en la entidad mexiquense no se ha prohibido la comercialización de juguetes bélicos.
