En esta nueva normalidad por la pandemia de Covid-19, la solemne misa en honor a la Virgen del Carmen fue una celebración de fe y de esperanza.
Así lo señaló el presbítero que la ofició en el Templo de la orden del Carmen de esta ciudad, la cual fue transmitida por Facebook Live, ya que por la emergencia sanitaria los espacios religiosos se encuentran cerrados al culto desde el 20 de marzo pasado.
En esta ocasión, al velar por la salud de los feligreses, se interrumpió una tradición de festejos presenciales en honor a la Virgen del Carmen que se desarrollaba casi todo el mes de julio con diversas actividades religiosas, recreativas y gastronómicas.
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El sacerdote, al comienzo de la misa, dijo que ésta tendría la intención de ser una celebración de fe, de esperanza y de amor.
Enseguida se pidió a los pocos asistentes que usaron cubrebocas y guardaron la sana distancia, así como a los seguidores en redes sociales un minuto silencio para solicitar la presencia de Dios, sobretodo en quienes más sufren.
En la homilía, el presbítero destacó el papel de María quien estuvo al pie de la cruz de su hijo. Y expresó que ella es nuestra estrella, nuestra madre y quien nos guía en la vida.
Asimismo, destacó la importancia del amor al ser un sentimiento que no descansa, simboliza fuerza y es un elemento que nos permite creer, esperar y levantarnos.
“Celebrar a nuestra Madre Santísima, es creer en un mundo nuevo donde reine el amor, donde todos seamos hermanos”.
Exhortó a la comunidad que siguió la misa desde sus hogares a tomar como ejemplo a Jesús.
Luego de la bendición final de la celebración, los frailes carmelitas enviaron un abrazo a los devotos quienes por las condiciones sanitarias no pudieron asistir al templo a honrar a la Santísima Virgen.
“Es una pena que por las circunstancias que estamos viviendo no puedan estar cerca de la sagrada imagen, ni en este recinto que es su casa, pero a nombre de todos los frailes y para todos los que llevan el escapulario muchas felicidades”.
Al término de la misa se entonaron cantos referentes a esa congregación religiosa y los presentes brindaron varios aplausos a la Virgen festejada.
El semáforo de alerta epidemiológica se encuentra en color rojo en la entidad, por lo que no se ha permitido la apertura o el retorno a las diversas actividades, suspendidas temporalmente para evitar el riesgo de contagio del virus SARS-Cov-2; pese a ello, no impidió llevar a cabo las misas de víspera por la vía remota y la del 16 de julio, fecha de la celebración a la Virgen.
De igual manera, la imagen de la Virgen del Carmen fue bajada de su altar a la parte central del recinto, la cual fue captada durante la misa virtual.