Pese a que en el mundo creen que alos mexicanos no nos asusta la muerte, cuando perdemos un familiara causa de la violencia delincuencial que tan altos índicesregistra en México, a la pérdida del ser querido se sumansentimientos como ira, impotencia y resentimiento que hacen másdifícil superar el duelo, aseguró Yazmín Escobar Tapia,investigadora adscrita al área de Recursos Humanos de laUniversidad Autónoma del Estado de México (UAEM).
Afirmó, sin embargo, que todapérdida o muerte de un familiar, cualquiera que sea la causa, esuno de los procesos familiares más difíciles de enfrentar a pesarde que desde el momento del nacimiento sólo tenemos la certeza deque un día vamos a morir.
Las muertes violentas, explicó,empiezan a digerirse a partir del reconocimiento del cadáver de unfamiliar, luego con la preparación del funeral y todo el rito queimplica: velación, ceremonia religiosa en algunos casos, elsepelio y los rezos se puede ir asumiendo que la persona ya noestá, pero superar el dolor y el pesar depende de la personalidadde cada uno de nosotros, señaló.
“La muerte de unenfermo terminal duele aunque ya estemos prevenidos, pero la muerteviolenta, llámese accidente automovilístico u homicidio, nosagarra desprevenidos, no nos pasa por la cabeza que podamos viviruna situación de este tipo”.
La psicóloga y maestra enCriminología y Criminalística recomendó, a quienes atraviesenpor una circunstancia parecida, no insistir en ver los cuerpos enel lugar de los hechos, porque son imágenes que nunca se van aborrar de la mente, por eso justificó que las autoridades nopermitan a los familiares acercarse, pues es menos traumáticoesperar a identificarlos en la morgue, lo cual es también unproceso muy difícil.
Yazmín Escobar Tapia tambiéndestacó la importancia de que los seres más cercanos a lavíctima se involucren en los preparativos del funeral, pues elhecho de llevarlos a cabo nos permite saber, y a nuestrasemociones, procesar que nuestro familiar ya no está.
Recomendó a los familiares de unapersona muerta por violencia delincuencial acercarse a la terapiapsicológica tanto la que puedan brindarle como víctima, como a laque tengan acceso por sí mismos, además de aceptar la compañíade otros familiares y amigos que hayan pasado o no por unaexperiencia similar, porque las muestras de afecto y cariño sonalivio o, al menos, paliativo para su dolor.
FRASES:
“A la pérdida, por muerteviolenta del ser querido, se suman sentimientos como ira,impotencia y resentimiento que hacen más difícil superar elduelo”.
“Las muertes violentas, empiezan adigerirse a partir del reconocimiento del cadáver de un familiar,luego con la preparación del funeral y todo su rito”.