Toluca, México.- A partir de este domingo quedó suspendido el servicio de transporte foráneo en todas las rutas del sur del Estado de México y algunas del Valle de Toluca, por el robo de 66 autobuses registrado el viernes y el fin de semana por estudiantes de la Normal Rural Lázaro Cárdenas de Tenería.
Odilón López Nava, delegado de la Cámara Nacional del Autotransporte Pasaje y Turismo (Canapat), reveló que el servicio quedará mermado en más del 50 por ciento en varias rutas, pues no hay unidades para dar abasto a los usuarios.
Vamos a tener que suspender el servicio hasta que los autobuses nos sean devueltos y se pueda reparar los que fueron dañados.
Odilón López Nava, delegado de la Canapat.
El recorte de servicio afectará a un aproximado de 12 mil usuarios de los municipios de Tenancingo, Ixtapan de la Sal, Ocuilan, Joquicingo, Malinalco, Valle de Bravo, Tejupilco y Tenango del Valle.
Mientras que en rutas del Valle de Toluca podrían estar afectadas las de Santiago Tianguistenco y Toluca, detalló el líder transportista.
De acuerdo con los datos de la Canapat, derivado del robo de unidades, el secuestro de operadores, así como el daño a tres oficinas y el destrozo en al menos 15 autobuses, el monto asciende a cerca de 200 millones de pesos.
Lo que obligará a cerrar de forma temporal terminales regionales o reducir al mínimo el servicio.
“Estamos desamparados con los daños que se ha hecho a la flotilla y tenemos que dejar sin servicio a nuestros usuarios a quienes pedimos su comprensión”, sostuvo el empresario en entrevista telefónica para este diario.
López Nava exigió a las autoridades estatales y federales que la normal sea reubicada a otro estado, pues la mayoría de estudiantes provienen de otras regiones del país y han mermado el servicio en la zona sur y el Valle de Toluca.
Desde el viernes durante la madrugada y este domingo, al menos 66 autobuses fueron sustraídos de los corralones de encierro en Tenango del Valle, Santiago Tianguistenco y Tenancingo por parte de los normalistas.
Además de vandalizar tres oficinas regionales en las que se rompieron vidrios y mobiliario, así como romper puertas y ventanas de 15 autobuses.