Termina la temporada de estiaje en Valle de Bravo

Durante el 2019, fue el municipio con más incendios forestales al registrar 94, afectado 407.55 hectáreas de bosque  

Arturo Aguilar | El Sol de Toluca

  · miércoles 24 de junio de 2020

Foto: @AmbienteEdomex

La temporada de incendios de este 2020 culminó en Valle de Bravo con 233 hectáreas afectadas de bosque menos, en comparación al año pasado.

De acuerdo con información proporcionada por Probosque Región Valle de Bravo, en este municipio al inicio del mes de junio de 2019 se habían registrado 93 incendios.

En la misma temporalidad, para este 2020, solo se habían registrado 52 incendios, es decir, 41 incendios menos que el año pasado, representando una disminución del 44.08% con respecto al 2019.

Con respecto a las hectáreas de bosque afectadas, en el 2019 se reportaron 399 hectáreas afectadas, ahora, hasta el 1 de junio de 2020 se habían registrado 166 hectáreas dañadas por los siniestros.

Esto representa el 58.39% de menos hectáreas afectadas en comparación con ambos años, lo que equivale a 233 hectáreas menos que las registradas durante el 2019.

Esta disminución del más del 50% en hectáreas afectadas se debe a que las brigadas de Probosque, destinadas al combate de incendios, estuvieron coordinadas con la destinada por el H. Cuerpo de Bomberos de Valle de Bravo, esto les permitió tener bases de combate en más puntos del municipio.

Estas bases están ubicadas en las comunidades de San Gabriel Ixtla, Cerro Gordo y San Juan Atezcapan, abarcando la zona oriente, poniente y sur del Pueblo Mágico, lo que permitía traslados rápidos para el combate eficaz.

Asimismo, las autoridades combatientes de incendios identificaron otros dos elementos que ayudaron a que los bosques vallesanos fueron menos afectados este 2020: la pandemia y la participación de la asociación civil organizada.

Pues a pesar de que los meses de abril y mayo fueron secos por que se retrasó de la temporada de lluvias, el que la gente no saliera a los bosques por el confinamiento sanitario para evitar la propagación del Covid-19 ayudó a que no hubiera incendios provocados.

De igual forma, en las distintas comunidades donde en años pasados se registraron incendios optaron por la creación de brigadas combatientes entre vecinos, lo cual ayudó al combate oportuno, pues eran más personas las encargadas de liquidar los siniestros en tierra.