Lerma, México.- El tramo carretero ubicado a la altura del puente de Amomolulco en la México-Toluca, se ha vuelto un paso mortal para automovilistas por el mal diseño en la señalización de los carriles de baja con los de alta velocidad.
Este tramo, que corresponde al sentido de la Ciudad de México a Toluca, abarca cerca de 500 metros, y donde los carriles se van estrechando de cinco hasta quedar solo tres de los carriles.
De acuerdo con Susana Bianconi, arquitecta y académica de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), el mal diseño del tramo carretero obliga a que los automovilistas invadan carriles y la peligrosidad de colapsos incremente.
"En la bajada de Amomolulco, entroncan dos carriles de súper por la izquierda y justo debajo del puente peatonal antes de Plazas Outlel, el carril de extrema derecha desaparece y eso es muy peligroso", explicó la especialista en entrevista telefónica para este diario.
Dicho tramo, es el mismo donde el 9 de enero del 2017 un tráiler arrollara a varios reporteros que cubrían un accidente previo en la zona.
Esa ocasión resultaron cuatro informadores lesionados, mientras que un empleado de la Junta de Caminos del Estado de México falleció tras durante el impacto.
Susana Bianconi considera que la peligrosidad de la vialidad en ese kilómetro, disminuiría de forma considerable, si se repintaran las líneas que separan los carriles.
Pues en menos de 500 metros los cinco carriles se reducen a sólo tres y obligan a que se junte el tráfico pesado con el ligero y el doméstico.
"Esa reducción de carriles, obliga a que los camiones como pipas y trailer, se junten con automovilistas convencionales, además del tránsito doméstico que se incorpora de la desviación de Lerma", explicó Bianconi.