La Unión Nacional de Padres de Familia (UNPF) considera que la aplicación de vacunas a docentes y alumnos para el retorno a clases presenciales no será suficiente, y se requiere de crear protocolos especiales y analizar caso por caso en las escuelas.
José Luis Romero, representante de la UNPF en Toluca, informó que la plantilla de docentes y la matrícula de alumnos del estado es uno de los más amplios del país, y el riesgo de contagio es más alto que en otras regiones.
“Junto con la vacunación deben implementarse medidas sanitarias, como el uso de cubrebocas, mascarillas, gel antibacterial, agua y jabón en los baños, sanitización de las áreas comunes en las escuelas, entre otras medidas más”, expuso Romero.
Explicó que el sector salud tendrá que disponer de un estimado de 250 mil dosis para docentes y más de 4.5 millones para alumnos, si se pretende retornar a clases presenciales en el corto plazo.
“La posibilidad de que los docentes, tanto de colegios públicos como particulares, puedan ser vacunados como una medida para propiciar el regreso a clases presenciales, y que de acuerdo a los registros de la Secretaría de Educación y de las diferentes asociaciones de escuelas particulares se estaría considerando en el Estado de México una población estimada de 250,000 docentes a vacunar, eso sería un buen principio entre las diferentes condiciones que deben darse para un regreso seguro a clases”, señaló.
Dijo que las autoridades sanitarias y educativas del estado deben garantizar que todos los insumos y los recursos, para llevar a cabo las medidas sanitarias en los planteles, estén garantizados.
“Los planteles educativos habrán de regular bajo protocolos que estén sujetos a las disposiciones de las autoridades de salud y educativas, quienes han manifestado un regreso cuando el semáforo epidemiológico se encuentre en verde, además de que sea un regreso a clases planeado revisando caso por caso, escuela por escuela, junto con los padres de familia, para también saber si los recursos para implementación de estas medidas están garantizados y disponibles para todos los estudiantes”, añadió el el representante de la UNPF en Toluca.
Advirtió que se debe considerar el riesgo para la comunidad en general y que se debe dar prioridad a la salud común, antes de un retorno acelerado.
En ese sentido, sostuvo que la Unión Nacional de Padres de Familia apelará a que el retorno se haga en las condiciones idóneas.
“Confiamos en los gobiernos, en que el proceso de vacunación cada vez se logre con un mayor avance en el menor tiempo posible; además, exhortamos a las familias a mantener las medidas para cuidar su salud frente al Covid-19, para que nuestros hijos y estudiantes puedan regresar a clases cuando estén dadas las condiciones de un regreso seguro y cuando cada una de las familias lo estime conveniente”, informó José Luis Romero.
Pidió que las familias sean pacientes y atiendan todas las solicitudes de la autoridad educativa y sanitaria, una vez que se inicie con la aplicación de dosis a docentes y alumnos.
“Sabemos que para muchas mamás y papás ha sido muy difícil atender a sus hijos y solventar los problemas que surgieron al dejar de asistir a sus escuelas y los efectos que esto produce en los estudiantes en su rendimiento escolar y en el aspecto socio emocional, pero también creemos que hay un bien mayor que es la salud de las personas y de la comunidad a la que pertenecen”, mencionó el especialista.