A pesar de estar en plena temporada de lluvias, el caudal del río Tizates sigue presentando sedimentos generados por bacterias coliformes las cuales se pueden percibir a simple vista y por el olor generado.
“Estamos en plena temporada de lluvias, cuando se supone el agua por la lluvia se lleva todo a su paso, y aun así se ve la lama blanca corriendo en el agua, incluso se queda atorada en las ramas y piedras” platicó uno de los vecinos al río quién prefirió el anonimato.
Estas bacterias son generadas por la descarga de aguas negras con contaminantes fecales que se vierten directamente en el río, y cuyo problema ha sido reconocido por el alcalde vallesano Mauricio Osorio Domínguez en meses anteriores.
El pasado 19 de febrero, en un recorrido hecho por la zona urbana que recorre el río Tizates, Mauricio Osorio lamentó la situación en la que se encontraba el río y admitió las descargas de aguas residuales directas que recibe.
“La realidad es que nuestro río Tizates, por muchos años, desafortunadamente autoridades como sociedad lo hemos abandonado, lo hemos descuidado y no solo eso, lo hemos afectado con basura, con descargas de aguas residuales que van directamente al río” comentó el edil en aquel recorrido.
“Desafortunadamente y hay que reconocerlo, porque no podemos tapar el sol con un dedo, sigue habiendo muchas descargas en el río Tizates” continúo diciendo.
Por ello, junto con organizaciones civiles decidieron recorrerlo para censar las tomas de drenaje de los vecinos del caudal cuya descarga se vertía directo en él, dando como resultado veinte tomas con irregularidades en 4 kilómetros de longitud recorrida.
Este problema supuestamente había quedado resuelto, pues los tubos que se veían directamente por el río, fueron señalados y taponeados para invitar a los particulares a regularizarse lo antes posible.
Sin embargo, tal parecería que no fue así. Pues a simple vista se puede observar como el contaminante corre en el río, estancándose entre ramas y piedras que topa a su paso.
Incluso, el olor es desagradable cuando llueve, pues se remueven los asientos que se encuentran en el fondo.
“Ya huele feo, en primavera, cuando hace calor, huele bien feo, pero en las lluvias se quita, ahorita está a punto de llover y huele feo, imagínese” dijo el vecino del barrio del Frontón.
Cabe destacar que el río Tizates es uno de los siete caudales de agua de manantial que desemboca en la Presa Miguel Alemán Valdés del municipio, y es el único que pasa por la mancha urbana del pueblo mágico.
Es decir, esta agua con contaminantes. llega directamente a la presa la cual es un punto turístico atractivo para el municipio, y abastece de agua al Sistema Cutzamala.