Un gran porcentaje de mujeres que habitan y trabajan en los municipios de Ecatepec, Tecámac y Texcoco, en apoyo al paro de labores denominado “Un día sin Mujeres”, decidieron no acudir a laborar.
Cabe resaltar que, pese a esta decisión, las ediles de Tecámac y Texcoco, Mariela Gutiérrez Escalante y Sandra Luz Falcón Venegas, si se presentaron a laborar ya que indicaron que debía cumplir con los compromisos ya agendados con anterioridad. Además de las alcaldesas, las mujeres con puestos directivos informaron que también se presentarían a trabajar por decisión propia.
Un ejemplo es Victoria Arriaga la directora de Protección Civil y Bomberos de Ecatepec quien manifestó que el presentarse a trabajar además de ser por convicción obedece a la gran responsabilidad de su cargo.
“El puesto que yo desempeño, es vital para los habitantes de Ecatepec. No puedo darme el lujo de faltar y dejar de coordinar los servicios de emergencia, además soy una de las directoras más atacadas por los “actores políticos” todos hombres, quienes se han dado a la tarea de descalificarme llamándome con adjetivos calificativos negativos, desde “huachicolera” e “inepta”, entre otros demasiado ofensivos.
La funcionaria señaló que en su área la mayoría de las empleadas se solidarizaron por lo que solo hubo 7 ausencias.
La ausencia de mujeres fue notable desde las principales avenidas por donde circulan las unidades del Transporte Rosa de la Línea I del Mexibús, ya que es común que estas circulen a su total capacidad, sin embargo, la mañana del lunes estas realizaron sus corridas con muy pocas pasajeras.
De acuerdo con Transmasivo, empresa concesionaria del Mexibús Línea I, con derrotero desde la terminal Ojo de Agua en Tecámac hasta Ojo de Agua en Ecatepec, los autobuses articulados tiene capacidad de hasta 160 usuarios pero la mañana del lunes el denominado “Transporte Rosa” con 15 pasajeras.
Alejandra “N”, joven enfermera y usuaria del Transporte Rosa indicó que aun cuando fue opcional el presentarse o no decidió asistir porque sabía que habría poco personal. “Para los enfermos no hay días de asueto, ni paros ni descansos, si no vamos, ¿quién les administra sus medicamentos?”, dijo.
Otra de las pasajeras, Antonia “N”, señaló que al ser una empleada doméstica para ella no existen días no laborables, solo su día de descanso.
Ya no estoy para estas cosas, si no voy, me corren y luego, ¿quién le da de comer a mis hijos?.