Hay un riesgo de que echen abajo la Ley de Seguridad Interior, y entonces las Fuerzas Armadas estarían en peor situación que ahora. “Espero que no llegue al pleno, que en comisiones de Defensa Nacional, Estudios Legislativos, Segunda, Gobernación y en ampliación de turno a la de Derechos Humanos nos sensibilicemos y que percatemos de que esto no es la respuesta, afirmó el senador Luis Sánchez Jiménez (PRD). El coordinador de la bancada del Sol Azteca en el Senado, manifestó que en reunión con 13 representantes de 250 ONG’s, hubo señalamientos, reclamos de que esta ley es contraria a los derechos humanos.
“Es una ley que permite la opacidad total, que le da facultades al Ejército sin ningún control. Se habló de los comentarios del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos. Hicimos énfasis en que estos argumentos más los de la sociedad sensibilicen a los senadores del PRI, PAN y Verde de que no vamos a votar esa ley aquí en el Senado”, afirmó.
Manifestó que todavía no hay fecha para el análisis de la minuta que llegó de la colegisladora. “Espero que esto del Alto Comisionado de la ONU los sensibilice porque la verdad es que es grave la propuesta de ley”.
Pero además, no le va a servir a las Fuerzas Armadas. “Si nosotros no logramos las firmas para ir a una acción de inconstitucionalidad, seguramente la Comisión Nacional de los Derechos Humanos lo va hacer, precisó en entrevista.
Y en conferencia de prensa, representantes de 250 organizaciones no gubernamentales, exhortaron al Senado de la República a no aprobar la minuta de la Ley de Seguridad Interior. Acompañaron sus palabras con mantas y leyendas “Queremos vivir en paz”.
En conferencia de prensa, la presidenta de Causa en Común, María Elena Morera, comentó que en vez de aprobar esta ley en fast track se debe abrir un debate con toda la sociedad y un programa para sacar de forma gradual de las labores de seguridad pública a las Fuerzas Armadas.
Por su parte, Denisse Dresser, del Colectivo Seguridad sin Guerra, pidió a los legisladores atender las advertencias de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y organizaciones internacionales sobre los riesgos de aprobar esta Ley de Seguridad Interior.