Al menos 23 personas murieron tras ser atacadas por miembros del grupo extremista Boko Haram cuando regresaban de un funeral en la localidad de Nganzai, en el estado de Borno, en el noreste de Nigeria, informaron este domingo fuentes de seguridad.
Los atacantes a bordo de tres motocicletas abrieron fuego contra un grupo de hombres cuando regresaban de un funeral en el distrito de Nganzai cerca de la capital del estado, Maiduguri, indicó el líder de la milicia local Bunu Bukar Mustapha citado por el diario nigeriano Vanguard, con sede en Lagos.
Los hombres regresaban a Badu Kuluwu desde la cercana aldea de Goni Abachari, donde habían asistido anoche a una ceremonia de despedida de un familiar, explicó Mustapha.
Los combatientes de Boko Haram han intensificado sus ataques en el distrito de Nganzai, incluso apenas el jueves anterior atacaron un campamento para personas desplazadas en las afueras de Maiduguri, matando a dos residentes y saqueando suministros de alimentos después de quemar una base militar cercana.
En septiembre pasado, el grupo islamista mató a ocho personas y robó ganado en dos aldeas de la zona después de que los residentes intentaron evitar que se llevaran a sus animales.
Boko Haram ha aterrorizado a la población del norte de Nigeria, cometiendo ataques contra la policía, escuelas, iglesias y civiles, además de bombardear varios edificios del gobierno y secuestrar a civiles.
Desde 2009, más de 27 mil personas han muerto y alrededor de 2.5 millones han huido de sus hogares a causa de la violencia de Boko Haram, que busca imponer un Estado islamista en el norte de Nigeria, según cifras de las Naciones Unidas.