—Ahora qué sucedió jóvenes, —pregunta el hombre de botas de hule, —una difuntita, responde el grupo de chavos que permanecen sentados sobre una lomita del otro extremo del camino conocido como Calzada al Refugio en Santiago Tlacotepec, municipio de Toluca. De frente, entre las milpas el cuerpo de una mujer atada de manos permanece desconocida.
La hallaron muerta desde tempranas horas.
—Pero por enfermeda, veda, —no, la vinieron a tirar, —responden los curiosos.
—Ah, ora pues, —exclama el hombre mientras se retira indiferente.
HALLAZGO
Pasadas las 8:30 horas, un hombre del poblado habría salido a buscar a sus perros y dio con el cuerpo.
"Dicen que un señor andaba buscando a su perro y él fue quien le avisó al delegado", menciona un vecino que se acercó a saber lo ocurrido.
Después de dos horas, el pueblo entero sabía lo ocurrido y comenzaron a arremolinarse a las cercanías del lugar de los hechos.
"Estaban saliendo los del kinder, entonces empezaron a correr la voz que la habían encontrado", repone un grupo de mujeres.
La tranquilidad del pueblo se rompió con el hallazgo. Aunque dicen ya están acostumbrados.
"Pasa uno, y ni en cuenta", dicen los vecinos que llegan y se van a los pocos minutos. Una indiferencia inmutada.
"Así como la vi, como de unos 38 a 39 años. Es joven, se le ve por su fisonomía, en su pleno apogeo, uno que es conocedor", explaya un hombre que se acercó al lugar antes de la llegada de la policía.
CARACTERÍSTICAS
De acuerdo con el parte policiaco, la mujer vestía pantalón de mezclilla azul cielo, con chamarra color mostaza, unos zapatos cerrados tipo botín y estaba bocabajo.
En la escena, fuera del acordonamiento, un policía de investigación de la Fiscalía estatal saca sus sondeos, asemejando a un encuestador del Inegi.
Pregunta entre vecinos y le repiten lo mismo que toda la mañana divulgaron. Pero es su labor sacar hasta el más recóndito sondeo.
"No se puede acercar más, ya es acordonamiento", pide el perito. En realidad entre el reportero y él no hay mucha diferencia en la estrategia de indagar en el lugar. Solo que él usa su propio método.
Los habitantes de El Refugio insisten que en la zona no se supo de una mujer desaparecida. Su hipótesis es que la víctima fue llevada hasta el lugar desde otra zona del municipio.
"No, aquí no se sabía de una muchacha conocida desaparecida", reponen los grupos de curiosos.
"Aquí es el tiradero de cuerpos", reprochan otros, "los delegados estaban aquí en la mañana, ellos deben saber más".
La escena lleva casi cuatro horas acordonada y los peritos no llegan.
—De aquí no se puede ver nada, —dialogan dos mujeres. —Sí se alcanza a ver de aquí la chamarra, mira.
El morbo y la curiosidad son las que primero llegan a una escena del crimen.
Este viernes contó dos hallazgos de cuerpos de mujeres.
En otro extremo del valle de Toluca, casi a la misma hora, en el municipio vecino de Almoloya de Juárez, ocurrió otro hallazgo.
Una mujer fue hallada en un paraje de San Pedro la Hortaliza, carcomida por una jauría de perros, según los reportes policíacos.