De acuerdo con el reporte policiaco, antes de las 7:00 horas, una camioneta con razón social Empresa de Seguridad Privada (ESP), habría sido interceptada por dos sujetos armados en la calle de República de Brasil, esquina con Honduras, donde lesionaron a los custodios y luego huyeron con el camión.
El rino blindado fue abandonado metros adelante, en la esquina con calle Las Américas, pero ya sin la carga del efectivo.
El informe también reza que los dos custodios fueron auxiliados por paramédicos, quienes los trasladaron a un hospital cercano.
"Los dejaron tirados en la calle, uno estaba muy herido y le llamamos a una ambulancia", señaló la fuente a este diario.
Detrás de las cintas rojas, la camioneta de valores asaltada seguía con las puertas abiertas, la lateral derecha y una de las de la caja blindada. Una hora atrás, el reporte indicó que los dos custodios del vehículo fueron amagados y baleados en calles de la colonia Américas.
En dicha colonia la rutina no suele tener sobresaltos tan temprano, menos escuchar balazos cuando despiertan, pero este jueves la situación fue completamente diferente en una de sus calles apacibles.
- Por si no lo viste | Supuestos extorsionadores de pollero de Toluca rinden cuentas a la justicia
Escuchamos los disparos pero no salimos, hasta ahorita que vimos todo el relajo.Vecina de la colonia
UN ALBOROTO TRAS LA BALACERA
Cuando los peritos vieron que comenzaron a llegar más reporteros, el acordonamiento lo extendieron a otra calle. Como muestra, cerraron el cruce de República de Brasil hasta el cruce con Rafael M. Hidalgo. Hicieron lo propio del otro lado de la calle, donde quedó un chaleco antibalas de los custodios tirado sobre la banqueta.
"Échence más atrás, por favor, y que no pase más gente", ordenó uno de los peritos de la Fiscalía Mexiquense porque a esas horas, cuando a un no comenzaban las pesquisas, los curiosos brincaban el acordonamiento para transitar de un lado a otro.
Los peritajes armaron alboroto en esa parte de la colonia Américas. Desde sus ventanas en el segundo piso y desde las azoteas, los vecinos asomaban su vista y tomaban una que otra foto.
Era horario para salir a la escuela, a la oficina y a la fábrica, era horario en que la vida comienza en esta colonia apacible de la capital mexiquense, que pocas veces se despierta con una detonación de arma de fuego.
"Aquí no pasa seguido eso", dijo otro vecino, convencido que esta parte de Toluca no es tan violenta y tan insegura.