Valle de Chalco, Mexico.- Acompañados de familiares, madres de familia, amiguitos y vecinos, les dieron el adiós en el panteón municipal de San Miguel Xico a la niña Emily Lizet y Jesús Javier, de cuatro y dos años de edad, quienes murieron calcinados en el interior de la vivienda en Oriente 44, colonia Providencia, donde quedaron atrapados por el fuego.
Los féretros que fueron trasladados en una carrosa, fueron sepultados en una misma fosa, ahí sus madres, las hermanas Rosa María e Irene López, lanzaron una rosa blanca en medio del llanto, seguido de los aplausos de los presentes.
Ahí, el grupo norteño Los Campiranos que entonó en tres ocasiones la canción “Adiós Ángel Mío”, invadió a los asistentes en llanto.
Don Pedro, tío de los pequeños, que regresó de Pinotepa, Oaxaca, de sepultar a su papá, expresó que la tragedia cambiará la vida a su familia, las vecinas, por su parte indicaron que casi siempre dejaban encerrados a los pequeños, pues sus mamás estaban dedicadas a la vendimia.
A las 17:58 horas, cuando el sol se ocultaba del Cerro de Xico, los féretros de los dos niños quedaron en la tercera sección del camposanto, sobre la tumba se colocaron flores blancas.
Los vecinos que acompañaron a los dolientes, señalaron que Emily Lizet y Jesús Javier, eran alegres cuando salían a la calle a jugar, los recordarán siempre como buenos e inocentes.
La tristeza invadió a todos los que fueron vecinos de los menores, que vivían junto a la casa donde se ofició una misa de cuerpo presente, antes de que partieran al panteón.