Ecatepec, México. – La tarde del miércoles, estalló un artefacto explosivo en la capilla anexa a la catedral de Ecatepec, horas antes, una presunta llamada de amenaza de bomba en el palacio municipal de Jaltenco, ocasionó una gran movilización de elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA).
Minutos antes de las 17:00 horas del miércoles, estalló un artefacto explosivo que fue depositado al interior de la Capilla del Santísimo en la Catedral de Ecatepec, ubicada sobre la Calle Emilio Carranza esquina con Avenida Morelos en el primer cuadro del municipio.
El artefacto, fue colocado detrás del pulpito que, al detonar únicamente dañó la base de una silla de madera, no hubo personas lesionadas, ya que la capilla, se encontraba vacía, de hecho, se encontraba cerrada, informó, Salvador Latorre, sacristán.
Cuando tronó el artefacto, yo pensé que había sido en la parroquia en la casa de la cultura, ya hasta después que regresé de la oficina y de ver la casa de la cultura, me di cuenta que, pues había sido en la capilla
el sacristán
Señaló que, tras el estallido al entrar a la capilla, encontró un artefacto de metal en el piso y un sobre con un nombre y una dirección de la Ciudad de México en una de las bancas de la capilla, la explosión, destruyó la base de una de las bancas.
Horas, antes, se registró una movilización por parte de elementos del ejército mexicano, quienes desalojaron a los usuarios y funcionarios del palacio municipal de Jaltenco, por una presunta amenaza de bomba.
La presunta llamada, fue recibida minutos antes del mediodía luego que la Policía Municipal, en sentido que había sido abandonada una caja de zapatos con aspecto sospechoso.
Temerosos, al enterarse, los ciudadanos que se encontraban dentro del inmueble salieron presurosos. En tanto el alcalde y directores se refugiaban en el Instituto de la mujer.
Elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), de la Secretaría de Seguridad del Estado de México (SSEM) y de la Policía Municipal, desalojaron el inmueble y acordonaron las calles mientras el edificio era revisado.
No fue, sino hasta después de las 14:00 horas que las fuerzas armadas se retiraron ya que no encontraron nada.
Personal del ayuntamiento, que solicitó reserva en su identidad, manifestó que “la amenaza de bomba”, se debió a una ejecución de embargo, una práctica común, aseguró entre los ayuntamientos de la entidad.