A los propietarios de estacionamientos en el valle de Toluca, le ha quedado claro que con la pandemia del Covid-19 los delincuentes también se están reinventando, ya que los atracos no únicamente han ido al alza, sino que han cambiado su forma de operar.
Julián Niembro Rivera, presidente de la Asociación de Estacionamientos en esta zona, informó que ahora los delincuentes dejan sus autos y los sustituyen por otros, como ocurrió recientemente en Ixtlahuaca.
“Los delincuentes ingresaron al estacionamiento con un vehículo robado y les entregaron su boleto, y con él sacaron del lugar una camioneta más reciente”, explicó.
Ante ello, reconoció que no pueden esperar que todos los robos los cubran las aseguradoras, por lo que también deberán invertir en este rubro.
De acuerdo con los datos más recientes de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), el robo de vehículos asegurados tuvo un fuerte aumento de 33.2%.
El empresario consideró que uno factor que ha contribuido a incrementar la inseguridad en este tipo de establecimientos considerados esenciales, es que muchos negocios permanecen cerrados, debido a la emergencia sanitaria del Covid-19.
“Muchos negocios no están operando, situación que está siendo contraproducente para nosotros en todos los sentidos, no solamente porque disminuye nuestra actividad, sino porque los delincuentes operan con mayor tranquilidad”, externó.
Por lo anterior, confió que con el apoyo que están brindando como sector para la reapertura de restaurantes con todas las medidas de seguridad por Covid-19, la problemática antes referida pueda disminuir un poco.
“Lamentablemente, la delincuencia a causa de la pandemia ya la estamos viviendo. La realidad es que justificado o no, la inseguridad ha ido en aumento”, apuntó.
Derivado de la pandemia que se vive, mencionó que muchos estacionamientos están descuidando la parte de seguridad, porque algunos operan con un limitado número de trabajadores.
Aunque, destacó que ha habido apertura por parte de las autoridades para atender este tema, la realidad es que la delincuencia ya las rebasó.