Pareciera que la muerte paró y desveló a todo el pueblo de San Lorenzo Oyamel, municipio de Temoaya. Están esperando a que lleguen todos los cuerpos de las víctimas que fallecieron en la tragedia de la familia de peregrinos rumbo a San Juan de los Lagos, Jalisco.
Se trata de la familia Esquila de Oyamel, y se trata de mujeres, parejas y niños. Ellos son siete en total y en el pueblo vecino de El Molino, hay otras seis víctimas que también han arribado desde la madrugada de este lunes.
El sábado pasado durante la mañana, 13 peregrinos que habían salido de Temoaya fallecieron en un accidente carretero en la autopista León-Aguascalientes en el municipio de Lagos de Moreno.
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Las familias habían salido alrededor de la medianoche del viernes 29 de enero y llegarían a San Juan de los Lagos, Jalisco, alrededor de las 8:00 horas. Sin embargo, la camioneta en que viajaban se accidentó momentos antes de arribar a su destino.
“Se accidentaron antes de llegar, yo me enteré hasta las diez de lo que había pasado”, relató Guadalupe, integrante de la familia Esquila y de quien fallecieron su madre, tres sobrinos y su cuñada.
Tres de los cuerpos, el de Josefina, la madre de Guadalupe, y el de su cuñada Rosa y el de su sobrina Lupita, fueron velados este lunes durante el día en la casa de los Esquila. Por la noche los siete cuerpos se deberán juntar debajo de las lonas amarillas que montaron en esa casa para un velatorio colectivo.
“Se está esperando a que llegue el último cuerpo, para ponerlos a todos aquí en esta casa”, explicó uno de los tíos de las víctimas.
Desde el domingo por la noche, en la calle Viaducto México no hay calma. Hay tres domicilios aledaños unos a otros, donde se pusieron cartulinas para informar del velorio y levantaron unas lonas con sillas para los rosarios.
“No hemos dormido, para esperar los cuerpos”, reitera Guadalupe, quien luce más fuerte que su abuelita y sus hermanos. Uno de ellos, está en cama padeciendo las lesiones que sufrió en el accidente carretero, dice Lupita.
A esos tres domicilios de la calle Viaducto México han entrado y salido este lunes personas que llegan con veladoras, y flores, dar abrazos y rezar en las sillas que están a lo largo de un corredor que inicia en un portón blanco. Al fondo, los tres cuerpos en ataúdes y llenos de flores y fotos.
En San Lorenzo Oyamel hay luto desde el fin de semana y en el pueblo vecino de El Molino, ocurre lo mismo. Este lunes también velaron otros seis cuerpos.