Metepec, México -¡Sabemos que nova a regresar pero por lo menos que el culpable sea detenido!-Pidió Roxana Gómez, hermana de Michael Marcelo Gómez Solís, unjoven de 18 años de edad que tenía como sueño ser músico antesde fallecer atropellado en la avenida Comonfort por unautomovilista que se pasó el alto.
"Él tenía su hora de llegar ycuando nos percatamos que ya no tocaba a la puerta recibimos unmensaje de una compañera suya, que nos dijo que había ocurrido unaccidente cerca de su trabajo, que su hermano ya había llegado,fue entonces que pensamos en lo peor", relató Roxana, aúnincrédula de que un automovilista que no respetó el rojo delsemáforo, les haya quitado a su hermano el menor.
Pasaban las 22:00 horas y minutosdel pasado jueves 23 de marzo, cuando Michael salió de su trabajode medio tiempo en un café ubicado al interior de la plazaComercial Providencia de la avenida Comonfort.
Marcelo tomó camino a su casa ubicada en lacolonia La Michoacana, como era su costumbre debía andar unascuadras a pie para llegar, pero antes debía cruzar variossemáforos y fue en uno de esos que ocurrió elaccidente.
"Nos han llegado muchos mensajes que nos dicenque estaba en el semáforo esperando pasar y cuando se puso en rojoun coche que venía muy rápido lo arrolló cuando bajó labanqueta y murió al instante", detalló la hermana del jovenmúsico.
Según los reportes policiacos, esa nochealrededor de las 22:30 horas se reportó el incidente; la víctimaera un joven, de quien no se sabía nombre, ni había supuestamenteresponsable detenido.
También se reportó que la víctima vestíatenis y pantalón de mezclilla, y que había muerto en el lugar delos hechos.
“El cuerpo mi hermano lo fuea identificar al Semefo de Toluca, ahí lo llevaron y supimos queera mi hermanito”.
A Michael lo enterraron el sábado pasado en elpanteón de municipal de Metepec, acompañado de sus amigos ycompañeros que supieron de su tragedia.
El joven de 18 años, como en casos similaresde personas de su edad, tenía sueños por cumplir, pues queríaser músico, en poco tiempo ingresaría al Conservatorio de Músicay para eso había conseguido su trabajo de medio tiempo en lacafetería.
“Le gustaba tocar laguitarra y el bajo, era muy bueno, también componía sus cancionesy escribía versos, es muy feo lo que le pasó y aunque sabemos queya no se puede hacer nada regresarlo, pedimos justicia para él”,volvió a externar Roxana, luego cortó sus palabras y terminó laentrevista.