La detención de Genaro Navarrete ocurrió cuando estaba con su hijo y su yerno enrolado en un trabajo de construcción. Los policías de investigación arribaron, los tiraron al suelo y les apuntaron con armas largas. A dos de ellos los encerraron en un baño en obra negra, menos a Genaro, a él se lo llevaron a bordo de una camioneta y desaparecieron.
“Les dijeron que no hicieran ching....”, relata Gabriela Navarrete, hija de Genaro. Su hermano testificó cada detalle de la detención que, a los ojos de la familia, fue un “levantón”, sin ninguna bondad de humanidad.
Eso ocurrió la semana pasada, el miércoles 9 de junio en la comunidad de Morelos, Xalatlaco. Pero a Genaro la Fiscalía lo “venadeaba” desde hace meses, cuenta Gabriela. A Los Tejocotes, localidad donde vive la familia Navarrete, se veía llegar vehículos oficiales de la Guardia Nacional buscando testimonios.
“Por un retrato hablado detuvieron a mi papá y gente que lo señaló que era él”, reprocha Gabriela en una llamada telefónica que sirvió de entrevista.
Día de enfrentamiento
El 3 de marzo de 2021 hubo una desbandada de patrullas de la policía estatal y la Guardia Nacional en la zona conocida como Tlacuitapa, límites de Xalatlaco y Santiago Tianguistenco, donde se desempeñaba un operativo contra la tala clandestina.
Hubo disturbios y los presuntos taladores machetearon a los uniformados, a uno de ellos lo trasladaron vía aérea a un hospital, donde falleció.
Vía un video que circuló en redes sociales, se observó al elemento lesionado que era sujetado por sus compañeros hasta un helicóptero.
La persecución
Días después comenzaría una persecución en contra del albañil de 63 años. A los oídos de la familia Navarrete llegó información sobre que se recabaron testimonios en el pueblo contra los responsables del enfrentamiento. Pero no había sospechas que fueran en contra de Genaro.
“Los de la Guardia Nacional dicen que fue mi papá, pero yo miré el retrato hablado y no hay parecido, la persona es más joven”, aseguró Gabriela Navarrete.
Día de la detención
El hermano de Gabriela llegó a su casa unas horas después de la detención de su padre. Les dijo lo que había ocurrido y allí comenzó la desventura.
“Lo trasladaron al penal de Tenango, pero no supimos nada de él después”, relata la joven.
El argumento
La familia Navarrete asegura que el 3 de marzo de 2021, Genaro estaba trabajando de albañil en la comunidad El Capulín, ubicada a una hora y media donde ocurrieron los hechos.
“Mi papá se iba los lunes y regresaba los sábados para no gastar, por eso es imposible que haya estado”, señala la hija del procesado.
El jueves 10 de junio se celebró la primera audiencia por los delitos de robo con violencia y homicidio contra Genero Navarrete. El domingo un grupo de vecinos se sumó a la familia e iniciaron un plantón en los juzgados anexos al penal de Tenango del Valle, mientras transcurren las audiencias.
Hasta este martes, allí se mantenían las carpas y mantas de apoyo al albañil, a la espera de la resolución del juez.