Después de año y medio de estar detenido enel penal de Barrientos, Fernando “N”, presunto autorintelectual del asesinato de la joven Karen Esquivel de 19 años yla señora Adriana Hernández de 52 años, el juez de Control deDistrito, Aldo Rivera Mercado, inició el acto de apertura dejuicio oral contra el valet parking.
Debido a que el presunto culpable de este doblefeminicidio, se negó a aceptar un juicio abreviado, su defensaoptó por seguir el juicio oral, donde ambas partes podránpresentar pruebas.
Durante la audiencia de este martes, elMinisterio Público así como la asesora jurídica de RebecaEspinoza de la Monteros, madre de la víctima, pidieron que seareparado el daño moral y se les pague las terapias psicológicas alas que constantemente es sometida la familia de la víctima, asícomo la pena máxima de 70 años para Fernando “N”, valetparking, donde trabajaba Karen Rebeca Esquivel.
Asimismo se solicitó que dentro de lastestimoniales se presentaran las maletas que se usaron paratrasladar los cuerpos de las dos víctimas, de color gris yazul.
Además se citó a comparecer a policíasmunicipales, familiares del presunto inculpado, vecinos, así comoa la propietaria de la vivienda donde se localizaron las maletascon los cuerpos adentro.
Rebeca Espinoza de los Monteros, madre de lavíctima, afirmó en entrevista que la reparación del daño quese está pidiendo no es suficiente, “pero es lo que marca la ley,tanto en el tema material como moral”.
Dijo que se ha iniciado el juicio oral y que nosabe cuánto durará, “esto implica todo el desahogo de pruebasque consta en la carpeta de investigación y aunque habíaoportunidad de un proceso abreviado que era más rápido, habrá undegaste emocional nuevamente, pero sí se tiene que hacer, porquetenemos las pruebas suficiente para comprobar la culpabilidad delvalet parking. Él no tiene ninguna prueba a su favor, por ello esseguro que sea condenado”.
Por su lado la exesposa de Fernando “N”, elpresunto autor intelectual de este doble feminicidio, LeticiaHuerta, quien ayer acudió a la audiencia, declaró que no esculpable y que éste es un “chivo expiatorio”, que salióhuyendo, por miedo.