Toluca, México.- La tragedia de Keilany, pequeña de cuatro años fallecida al ser atropellada por un camión del transporte público en la zona de la terminal el pasado 26 de octubre, está en la zozobra y sin apoyo a la familia.
De acuerdo con familiares consultados, la Fiscalía General de Justicia del estado ha ignorado el caso y les notificó que la carpeta de investigación se encuentra extraviada.
Nos han dicho en la Fiscalía que la carpeta de investigación se encuentra extraviada y el abogado que nos asignaron desde la semana pasada no nos responde.Tía de la menor fallecida.
Pese a que existe un video en el que se muestra el momento del accidente, y donde de acuerdo a los familiares se identificó a una unidad de la línea Temoayense como la responsable, el operador que causó el hecho continúa prófugo y sin identificar.
Leticia Fuentes explicó que María Luisa, madre de Keilany salió del coma esta semana, sin embargo la Fiscalía no ha acudido a tomar su declaración.
Mi cuñada despertó y lo poco que ha dicho es que sí fue un camión de la línea Temoayense
Al respecto, la Secretaría de Movilidad informó que se ha investigado a la línea Temoayense y la línea Ala de Oro, por ser las que operan la ruta donde ocurrió el atropellamiento, pero ambas se han deslindado de lo ocurrido.
“En la zona no hay cámaras de videovigilancia y las dos líneas que visitamos para obtener datos, han negado tener relación al hecho”, afirmó la dependencia en una respuesta dada a este diario.
VIACRUCIS
María Luisa, madre de Keilany, quien fue ingresada al hospital Adolfo López Mateos desde el pasado 26 de octubre, lucha por su vida y ha sido sometida a varias cirugías para reconstruirle las partes del cuerpo que el camión le destrozó.
La están interviniendo cada tres días, ahorita está con el seguro popular pero hay algunas operaciones que ya no entran en el seguro y vamos a tener que pagar.Leticia Fuentes, cuñada.
El camión aún sin identificar, después de pasarse el alto del semáforo, le habría pasado por encima a María Luisa y su hija Keilany. Su segunda hija de 10 años fue la que se salvó y sólo sufrió una lesión en la pierna.
Entre toda la familia estamos trabajando para juntar dinero, para ayudarle con las medicinas.
La familia Fuentes González hasta el momento se encuentra sin ayuda, como ocurre en la mayoría de los accidentes provocados por el transporte público. En el Estado de México, la ley sólo obliga a una línea del transporte a hacerse cargo de gastos médicos e indemnizaciones hasta que la Fiscalía realiza un peritaje y determina que tiene responsabilidad.
En el caso de María Luisa y Keilany, el viacrucis aún ni si quiera comienza, pues el operador y la línea no han sido identificados.