La Secretaría de Seguridad (SS) de la entidad investiga a personal del Centro de Prevención y Readaptación Social de Santiaguito, en el municipio de Almoloya de Juárez, debido a su posible responsabilidad en la operación de la red cibercriminal que operaba desde el interior y fue desmantelada hace unos días, informó la titular de la dependencia, Maribel Cervantes Guerrero.
El pasado miércoles 19 de febrero la SS dio a conocer que dicha red trabajaba con tres niveles de apoyo, el primero de hackers que están en libertad, el segundo de 8 Personas Privadas de la Libertad (PPL’s) que también fungían como hackers y el tercero por personas en libertad que todavía no eran identificadas.
A través de esta red criminal se filtraban virus en las redes de gobierno y empresas para alterar la contabilidad y justificar pagos inexistentes y se realizaban ofertas de pago de productos financieros y servicios a bajo costo, por medio de perfiles apócrifos en redes sociales.
Al explicar que los penales mexiquenses en conjunto con los de Tamaulipas y Veracruz se generan el 20% de llamadas con fines de extorsión, Cervantes Guerrero aseguró que la tendencia para este ilícito es que algún familiar del PPL participe y consume la llamada telefónica.
Tras confirmar que ya se inició la investigación del personal del centro penitenciario para determinar si tienen responsabilidad en la conformación de dicha red criminal, Maribel Cervantes no especificó cuántos trabajadores son y a qué áreas pertenecen.
“Otra de las cosas que hicimos como parte de la estrategia del sistema penitenciario fue dividir la administración del sistema como tal y la generación del trabajo de inteligencia, de esta manera pudimos identificar a estas personas privadas de la libertad que desde el interior cometían estos delitos y también si estaban siendo apoyados por el personal del centro penitenciario”, explicó la funcionaria estatal.
Cabe recordar que con el desmantelamiento de la red cibercriminal ocurrido la semana pasada, fueron confiscados siete teléfonos celulares, en los cuales se habían creado varios perfiles de redes sociales para establecer comunicación con los hackers al exterior y de esta manera coordinar las operaciones de filtración informática y de lavado de dinero.
El pasado 7 de febrero la Secretaría de Seguridad mexiquense también desarticuló una banda de presuntos extorsionadores que operaba desde el interior del penal de Chiconautla.
De acuerdo con la información proporcionada por la dependencia estatal, en esa ocasión fueron confiscados varios teléfonos con los que los siete supuestos involucrados se contactaban con los familiares de otras PPL’s para pedirles una suma de dinero a fin de no causar lesiones a sus seres queridos.