TORREÓN. Ayer, en la reunión interestatal Covid-19 de la Alianza Federalista, el gobernador de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme Solís, dio un ultimátum, pues afirmó que los gobernadores irían a la reunión de la Conago en San Luis Potosí siempre y cuando se respeten las propuestas que establecerán, pues los nueve gobernadores que asistieron a la reunión afirmaron que “la unidad es su mayor fortaleza”.
Además, el gobernador coahuilense destacó que se consolidó un tema más al de la contingencia por el Covid-19, y es el de la educación.
Entre los acuerdos que propusieron los mandatarios estatales está el definir un esquema de indicadores a considerar para el regreso a clases, para lo que se establecerá una mesa de trabajo con los Secretarios de Salud y Educación, con el acompañamiento de los expositores, a fin de analizar información precisa basada en datos y estadísticas, considerando las opiniones de los sindicatos de trabajadores de la educación.
Dichos indicadores deberán de ser adecuados a la realidad de cada estado, considerando temas como la atención médica, enfocada en el capital humano, y posteriormente la infraestructura; la percepción de los padres de familia respecto del riesgo en la movilidad de los hijos; el magisterio y su compromiso y riesgo para impartir clases.
Además, medirán el beneficio económico de la educación, en específico el de la educación privada para analizar el crear un fondo de apoyo a la educación particular.
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